lunes, 17 de septiembre de 2012

Defensores de la enseñanza concertada argumentan que su existencia supone un ahorro al Estado, pues le resulta más barata que la pública. En realidad, los conciertos educativos son una estafa que, al final, la pagan las familias que llevan a sus hijos a estos centros. Un estudio de la OCU lo confirma.  

No hay comentarios: